Esta muestra que procede en su totalidad de la colección de la familia De La Sota, ha sido realizada por la GALERIA JOSÉ DE LA MANO en colaboración con el MUSEO GUSTAVO DE MAEZTU. La muestra se ha podido contemplar en Madrid desde el 8 de marzo al 30 de abril, viajando a Estella-lizarra, en una colaboración inscrita en el ámbito de la recuperación de figuras señeras de la pintura española del siglo XX.
La muestra en total recopila 27 piezas de diversos formatos, que presentan una significativa visión de la evolución y de la realidad del trabajo sutil y delicado de este magnífico artista.
LA EXPOSICIÓN
La muestra recopila 27 piezas de distintas técnicas y formatos, es el resultado de la selección realizada por el Comisario de la muestra Don Ángel Llorente Hernández, una selección fina y equilibrada que nos permite a través del recorrido sugerido, comprender y disfrutar del trabajo de este pintor cuya abstracción nos sumerge en la contemplación de la sutil eficacia de la racionalidad unida a la sensible ilusión del color atemperado.
Nos acercamos de esta manera a un artista, Jesús de la Sota multidisciplinar que se movió en un universo abstracto en el que el arte, en todas sus materializaciones, siguió siempre la más rigurosa abstracción geométrica. Su obra recuerda a los artistas de la normatividad, fundamentalmente a José María de Labra, artista amigo con el que expuso en distintas exposiciones a nivel nacional e internacional, como las famosas Hispanoamericanas o las itinerantes comisariazas por González Robles en el exterior, en las que estuvo siempre muy presente.
Pero en el caso de JESÚS DE LA SOTA (Pontevedra, 1924-Berlín, 1980), del que en esta exposición observaremos pinturas y dibujos ligados a sus proyectos de interiorismo, la arquitectura fue base fundamental de inspiración. Hermano del arquitecto Alejandro de la Sota, sus trabajos comunes integraron bien una de las máximas más interesantes de los años cincuenta, la génesis de un arte funcional y moderno capaz de demostrar la conciliación entre vanguardia y público.
Para esta exposición, el comisario Don Ángel Llorente ha seleccionado dibujos y óleos de su periodo más interesante, entre 1955-1961, los años iniciales de su carrera. Obras interesantes y ordenadas en distintas series ( los peces, gramíneas, las sillas) muestran el progreso hacia la abstracción cada vez más depurada que converge en sus grandes óleos abstractos que han inspirado el título de esta fina y singular exposición: “Silencios y ritmos”.
Destacamos el interesante catálogo que acompaña a esta exposición, revisión de toda una trayectoria vital por el importante trabajo de documentación sobre los proyectos de este artista, diseñador y pintor de la abstracción geométrica española, una línea de la producción artística española que desde hace años viene trabajando José de la Mano Galería de Arte y el Museo Gustavo de Maeztu, todo un gran esfuerzo para brindar al público Navarro la posibilidad de contemplar el trabajo más sugerente de un creador excepcional.
RECORRIDO EXPOSITIVO
La muestra sigue un recorrido estético, y está ubicada en las Salas de exposiciones, principal y anexo del Museo Gustavo de Maeztu.