Vidrios de Murano en el Museo Gustavo de Maeztu. La exquisita alquimia de un oficio eterno
La exposición «Color y transparencia: Descubriendo el vidrio de Murano» puede visitarse del 5 de abril al 1 de octubre de 2023. Compuesta por piezas de vidrio de Murano, ejemplos de la artesanía italiana, en la que cada una de sus piezas exclusivas cuenta con una gran historia
El Museo Gustavo de Maeztu presenta entre el 5 de abril y el 1 de octubre de 2023, en las salas de su exposición permanente, una selecta selección de vidrios de Murano que acompañarán y dialogarán con las obras de Gustavo en referencia a su gama cromática. La muestra es propiedad del coleccionista Jesús Sesma Sesma y es cedida al Museo Gustavo de Maeztu para esta ocasión.
Relacionar el vidrio y la pintura no es habitual. Si nos fijamos en los destellos, las transparencias y los reflejos, podemos ver que en las dos ocasiones no encuentran un fácil acomodo. Sin embargo, si nos situamos en la pintura de Gustavo de Maeztu, el color y la materia se hacen esenciales. La expresividad del cromatismo, junto con la rotundidad de las formas, hacen dialogar a ambos.
Gracias a la combinación de técnicas de origen oriental y métodos de producción de alto secretismo y una belleza inusual impactante, nació el vidrio de Murano a finales del s. X, un ejemplo de la artesanía italiana en el que cada pieza cuenta con una gran historia.
El vidrio de Murano es un material obtenido mediante la fusión de sílice, sosa y colorantes, sometidos a elevadísimas temperaturas, hecho que semeja al trabajo de Vulcano, según palabras de Paul Jenkins. Una peligrosa y laboriosa alquimia, cuyo resultado final es frágil, sutil y colorista.
Esta tradición se remonta a hace más de mil años. Fabricado de forma artesanal en una pequeña isla aproximadamente a un kilómetro de distancia de la ciudad de Venecia, en la isla de Murano, rodeado de tradición y leyenda e imbuida por la experimentación alquímica. El vidrio soplado de Murano es uno de los más apreciados del mundo, símbolo durante siglos del lujo y la pericia técnica. Su belleza y destreza justifican su reputación y prestigio.
La manera de trabajar el vidrio soplado de Murano se ha mantenido hasta la actualidad casi tal cual se hacía desde el Renacimiento, a partir de técnicas decorativas y de elaboraciones semisecretas. Se ha realizado con un fuerte vínculo familiar y según la antigua organización de los trabajos guiados por un maestro.
La «Fratelli Toso» es una de las firmas con mayor tradición en el uso de la antiquísima técnica de millefiori (murrine). Mediante esta técnica se creaban filigranas de vidrio coloreado que interactuaban para crear llamativos motivos florales. Su estilo guarda relación con el Art Noveau, como se puede observar en el vaso floral «Kiku&Redentore» del maestro Ermanno Toso.
Otro estilo popular en Venecia es el Sommerso (sumergido) un vidrio animado en su interior mediante la superposición de capas de colores vivos, que difundieron, entre otros, Archemide Seguso y Michele Onesto.
Murano también se ha nutrido de la colaboración con diseñadores de distintos campos de la creatividad contemporánea y de otras tradiciones culturales que han ido confluyendo en las Bienales de Venecia. La Venini&Co fue pionera en esta renovación, dirigida a crear objetos únicos destinados al coleccionismo y el interiorismo. En la muestra podemos encontrar el jarrón «Kukinto» un icono del finlandés Timo Sarpaneva para Venini.
Los creadores de Murano contemporáneos son continuadores de la calidad y tradición de la artesanía veneciana. El espíritu artístico les ha llevado a ponerlas en actualidad. Como muestran las obras de Massimo Micheluzzi «Mosaico», inspirada en la decoración arquitectónica clásica, la obra de Lorenzo Tartari «Marty». New York. y su revisión de la técnica murrine o la policromía y las formas orgánicas con las que experimenta Daniela Zentilin en «Le Quattro Stagioni»
Actualmente, el vidrio «a la manera de Venecia» ocupa un lugar preferente en las artes decorativas contemporáneas y se ha convertido en una forma de expresión artística mundial, impulsada por la revolución que supuso el movimiento «Studio glass» la tendencia contemporánea de arte en vidrio de mayor repercusión. La experimentación, la improvisación, las formas esculturales y el desapego de la función han insuflado nueva vida al vidrio. En un proceso de renovación que se retroalimenta, la presencia de artistas extranjeros en Venecia es constante y los maestros de Murano muestran sus habilidades y conocimientos en escuelas y centros de todo el mundo.
Dentro de esta corriente se sitúan artistas de Japón como Tsuchida Yasuhiko; de Estados Unidos, Kait Rhoads; de Australia, como Clare Belfrage y Jenni Kemarre Martiniello; o de España, como Rafa Abdón, que han trabajado en estrecha colaboración con maestros venecianos.
El vidrio de Murano es el resultado de una tradición artesanal enriquecida por el misterio de lo desconocido. Las piezas de Murano reflejan el deseo por admirar los objetos de gran belleza y los misterios, coloreado por el afán humano de perfección.
La entrada a esta exposición es gratuita y puede visitarse en su horario de apertura: de martes a sábado, de 9:30 a 13:30 horas y de 16:00 a 18:00; domingos y festivos, de 11:00 a 14:00 horas.