¿Cómo fue el proceso de conservación de las obras de Gustavo de Maeztu?

¿Cómo fue el proceso de conservación de las obras de Gustavo de Maeztu?

Durante el mes de junio de 2018, un equipo de conservación y restauración de patrimonio artístico llevó a cabo una ardua tarea para proteger el legado pictórico de Gustavo de Maeztu del polvo y las vibraciones que puedan causar las obras destinadas a la instalación del ascensor, por las que el museo que tenido que cerrar temporalmente sus puertas.

Los fondos de Maeztu fueron declarados en 2013 Bien de Interés Cultural (BIC), por lo que la protección requería una exigencia mayor. Alicia Ancho Villanueva, responsable de Restauración y jefa de Registro, Bienes Muebles y Arqueología del Gobierno de Navarra, dirigió y puso en marcha el proceso, para el que se ha contado con dos empresas: TSA y José Antonio Moreno Vallés.

Los trabajos se estructuran en dos partes, de acuerdo con la naturaleza de las obras de Maeztu.

 

PLANTA NOBLE | Óleos

Para pintar sus cuadros, el alavés empleaba una tela con una trama muy abierta, esto es, con menos puntos de agarre que, » en cuadros de gran tamaño, puede acarrear problemas de estabilidad a la pintura», explica Ancho.

Es por ello que uno de los óleos de mayor formato, el tríptico La Tierra Ibérica, tuvo que dividirse en las tres láminas que lo componen.

El cuadro `La Tierra Ibérica`, desmontado.

Las obras del ascensor romperán algunos muros del edificio, lo que provocará muchas vibraciones que se transmitirán a través de la pared. Esta inestabilidad se ha saldado con un tratamiento ativibración consistente en el levantamiento de una estructura con un sistema de suspensión que, a su vez, también cumple la función de aislar las pinturas del polvo.

Este soporte lo conforman un suelo de tablas de madera y una gran burbuja de plástico que simula el efecto de un «envasado al vacío«. Para ello se ha hecho uso de una práctica similar a la que los restauradores emplean en los tratamiento de anoxia contra xilófagos, es decir, eliminar el oxígeno sustituyéndolo por un gas noble, inerte, para impedir que los insectos carcoman la madera y los cuadros.

 

SEGUNDA PLANTA | Obra gráfica (dibujos y litografías)

Las salas de esta parte del museo se han sellado con un cerramiento fijo que no permite la entrada de partículas nocivas, como polvo.

Los dibujos y bocetos situados en los paneles unidos a la pared se han retirado y embalado, mientras que el resto de paneles, los ubicados en el centro de la sala sostenidos sobre el suelo, se quedan con los grabados. Para preservarlos, se ha realizado un trabajo global panel por panel: cada estructura se ha embalado con plástico.

Las litografías de grabados en planchas de zinc ubicadas en la torre del edificio quedan como si estuvieran expuestas al no correr riesgos de ningún tipo.